La detención fue resultado de una investigación conjunta entre la Fiscalía de Análisis Criminal y Foco Investigativo del Ministerio Público de la Región del Maule, el Departamento de Investigación Criminal (DICRIM) de Gendarmería de Chile, y la Policía de Investigaciones de Chile (PDI).Las pesquisas, que contaron con la colaboración de los equipos investigativos de Gendarmería, permitieron reunir diversas pruebas que llevaron a la detención del funcionario el pasado viernes. El arresto se realizó en una clínica psiquiátrica en Santiago, donde el funcionario estaba internado.Tras su detención, el Ministerio Público ordenó el traslado del gendarme a Linares para la audiencia de control de detención, quedando en prisión preventiva.La Directora Regional de Gendarmería en El Maule, teniente coronel Jessica Jiménez Moreno, señaló que la detención fue posible gracias al trabajo conjunto de Gendarmería y la PDI, que lograron acreditar la vinculación del funcionario con el ingreso de sustancias prohibidas al CCP de Linares, además del delito de cohecho.En paralelo, se ha iniciado un sumario administrativo y se decretó la suspensión inmediata del funcionario, así como el inicio del proceso de desvinculación. Como Gendarmería, tenemos una política de tolerancia cero con la corrupción, enfatizó la teniente coronel Jiménez.Como parte de las diligencias, la PDI allanó el domicilio del funcionario, así como dependencias fiscales del CCP de Linares.
Durante la mañana de este martes, Gendarmería anunció un sumario administrativo por el supuesto trato preferencial entregado a Eduardo Macaya Zentilli mientras se encontraba en la cárcel de Rancagua, región de O'Higgins. Ante esto, Macaya estuvo tres días en la cárcel, pero no habría estado en una celda como se esperaría de cualquier recluso, sino que permanecía en una sala de mujeres, con una habitación individual del hospital carcelario, debido a una supuesta condición de salud que padecería. Cabe mencionar que, los presos que ingresan regularmente se encuentran en celdas de aislamiento a la espera de su sentencia y en ocasiones quedan en módulos de baja peligrosidad para no mezclarlos con el resto de la población penal. Dado lo anterior, Gendarmería emitió un comunicado y señalaron quela Dirección Nacional de Gendarmería de Chile instruyó la realización de un sumario administrativo y designó un fiscal del nivel central. El sumario tiene como objetivo establecer la veracidad de dichos antecedentes y eventuales responsabilidades en la correcta aplicación de protocolos y procedimientos, concluyeron.
En una entrevista para Bío Bío Chile, Gendarmería entregó datos en los que se detallaron que los inhibidores de señal en cárceles llevan hasta el momento 11.900 celulares, 15.100 chips y más de 100 módems WIFI bloqueados en tan solo tres meses de operación. Sin embargo, diputados UDI denunciaron que solo un 30% de los dispositivos serían encendidos, pero de manera intermitente. Por lo que, Contraloría inició una investigación al respecto. Ahora bien, Gendarmería entregó datos que respaldan el funcionamiento del sistema las 24 horas. Ante esto, los inhibidores fueron aplicados hace tres meses en el cárceles de la región Metropolitana. Asimismo, desde Gendarmería señalaron quela acción de bloqueo que efectúa el sistema sobre un aparato de telefonía celular, provoca que este no pueda efectuar llamadas, ni uso de datos. Finalmente, la entidad sostiene que el sistema ha sido eficiente y anunciaron que se ejecutarán acciones y nuevas estrategias como automatizar los procesos de bloqueo, incorporar equipos para aumentar la detección de WIFI e incorporar detectores de celulares mediante dron.
Personal de Gendarmería recibió diferentes amenazas, ante la instalación de inhibidores de señal telefónica en algunas cárceles del país. Debido a esta situación, se dictó una alerta en la que se prohibía a los gendarmes salir de su radio de jurisdicción, por el posible riesgo que implicaba la advertencia de los reos. Sin embargo, el director regional metropolitano de Gendarmería, Hernán Villarroel, dio de baja la alerta el pasado viernes. Puesto que, la Contraloría General de la República se encuentra realizando una investigación tras una denuncia interpuesta por parlamentarios de oposición, acusando que los inhibidores de seña telefónica solo estarían activos en horario de almuerzo. Finalmente y tras esta decisión, el exdirector nacional de la institución, Claudio Martinez mencionó queno significa que el riesgo se haya extinguido. Probablemente, la evaluación que se hizo ante esa posibilidad es remota.
La detención fue resultado de una investigación conjunta entre la Fiscalía de Análisis Criminal y Foco Investigativo del Ministerio Público de la Región del Maule, el Departamento de Investigación Criminal (DICRIM) de Gendarmería de Chile, y la Policía de Investigaciones de Chile (PDI).Las pesquisas, que contaron con la colaboración de los equipos investigativos de Gendarmería, permitieron reunir diversas pruebas que llevaron a la detención del funcionario el pasado viernes. El arresto se realizó en una clínica psiquiátrica en Santiago, donde el funcionario estaba internado.Tras su detención, el Ministerio Público ordenó el traslado del gendarme a Linares para la audiencia de control de detención, quedando en prisión preventiva.La Directora Regional de Gendarmería en El Maule, teniente coronel Jessica Jiménez Moreno, señaló que la detención fue posible gracias al trabajo conjunto de Gendarmería y la PDI, que lograron acreditar la vinculación del funcionario con el ingreso de sustancias prohibidas al CCP de Linares, además del delito de cohecho.En paralelo, se ha iniciado un sumario administrativo y se decretó la suspensión inmediata del funcionario, así como el inicio del proceso de desvinculación. Como Gendarmería, tenemos una política de tolerancia cero con la corrupción, enfatizó la teniente coronel Jiménez.Como parte de las diligencias, la PDI allanó el domicilio del funcionario, así como dependencias fiscales del CCP de Linares.
Durante la mañana de este martes, Gendarmería anunció un sumario administrativo por el supuesto trato preferencial entregado a Eduardo Macaya Zentilli mientras se encontraba en la cárcel de Rancagua, región de O'Higgins. Ante esto, Macaya estuvo tres días en la cárcel, pero no habría estado en una celda como se esperaría de cualquier recluso, sino que permanecía en una sala de mujeres, con una habitación individual del hospital carcelario, debido a una supuesta condición de salud que padecería. Cabe mencionar que, los presos que ingresan regularmente se encuentran en celdas de aislamiento a la espera de su sentencia y en ocasiones quedan en módulos de baja peligrosidad para no mezclarlos con el resto de la población penal. Dado lo anterior, Gendarmería emitió un comunicado y señalaron quela Dirección Nacional de Gendarmería de Chile instruyó la realización de un sumario administrativo y designó un fiscal del nivel central. El sumario tiene como objetivo establecer la veracidad de dichos antecedentes y eventuales responsabilidades en la correcta aplicación de protocolos y procedimientos, concluyeron.
En una entrevista para Bío Bío Chile, Gendarmería entregó datos en los que se detallaron que los inhibidores de señal en cárceles llevan hasta el momento 11.900 celulares, 15.100 chips y más de 100 módems WIFI bloqueados en tan solo tres meses de operación. Sin embargo, diputados UDI denunciaron que solo un 30% de los dispositivos serían encendidos, pero de manera intermitente. Por lo que, Contraloría inició una investigación al respecto. Ahora bien, Gendarmería entregó datos que respaldan el funcionamiento del sistema las 24 horas. Ante esto, los inhibidores fueron aplicados hace tres meses en el cárceles de la región Metropolitana. Asimismo, desde Gendarmería señalaron quela acción de bloqueo que efectúa el sistema sobre un aparato de telefonía celular, provoca que este no pueda efectuar llamadas, ni uso de datos. Finalmente, la entidad sostiene que el sistema ha sido eficiente y anunciaron que se ejecutarán acciones y nuevas estrategias como automatizar los procesos de bloqueo, incorporar equipos para aumentar la detección de WIFI e incorporar detectores de celulares mediante dron.
Personal de Gendarmería recibió diferentes amenazas, ante la instalación de inhibidores de señal telefónica en algunas cárceles del país. Debido a esta situación, se dictó una alerta en la que se prohibía a los gendarmes salir de su radio de jurisdicción, por el posible riesgo que implicaba la advertencia de los reos. Sin embargo, el director regional metropolitano de Gendarmería, Hernán Villarroel, dio de baja la alerta el pasado viernes. Puesto que, la Contraloría General de la República se encuentra realizando una investigación tras una denuncia interpuesta por parlamentarios de oposición, acusando que los inhibidores de seña telefónica solo estarían activos en horario de almuerzo. Finalmente y tras esta decisión, el exdirector nacional de la institución, Claudio Martinez mencionó queno significa que el riesgo se haya extinguido. Probablemente, la evaluación que se hizo ante esa posibilidad es remota.
